miércoles, 29 de diciembre de 2010

EL DEBER DE VOLVER A SER PERSONAS


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Considero vital el deber (principio categórico) de volver a ser PERSONAS. Me explico, tenemos que volver a reconquistar nuestra parcela íntima y verdadera del ser. Ser nosotros mismos ¡y nadas más! Sencillo ¿No?


El hombre, en su concepción ontológica, es libre de pensamiento y acción. Por lo tanto, si no quiere renunciar a su suprema responsabilidad de ser lo que es, tiene el deber moral de regirse por estos valores supremos e inmutables. Como ejemplo práctico, hay una rama de la ética que es la deontología. La misma se compone de una serie de normas y códigos de obligado cumplimiento en muchas profesiones, tan conocidas y estimadas, como, por ejemplo, la medicina y los peritos judiciales (por supuesto que hay muchísimas más).

El relativismo moral nos está “destrozando” (en el sentido más brutal de la palabra). ¡No todo está bien! (“¿si tú crees que ya es suficiente?, pues… ¡vale!”).

Es meridiano que, después de esta reflexión, la Filosofía y las llamadas ciencias del espíritu tienen que volver a recuperar su posición cardinal en el sistema educativo.


Santiago Peña


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3 comentarios:

  1. Volver ser personas... volver a seres anteponen sus valores para interactuar de forma civilizada y poder vincularse con un otro desde el repeto.

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  2. Santi,

    Desde el mismo momento en que nacemos somos personas, jamás dejamos de serlo. Si reflexiono sobre la "persona" creo que el único inconveniente es que en nuestro caminar vamos involucionando aunque creamos que es evolución, para más adelante evolucionar realmente.

    Como seres puros en nuestros primeros tiempos de existencia aceptamos lo que nos ofrecen nuestros progenitores y la sociedad es un primer ciclo la vida, que más adelante con nuetros aprendizajes iremos limando y acomodando o desechando lo que nos sirva.

    La vida es un viaje de ida y de retorno, donde cada de uno dependerá llegar más lejos o quedarnos en un mismo lugar.

    Habran valores que despuntaran sobre otros y estos serán la base de la evolución o involución. No creo en los valores inmutables, si fuese así no existiría crecimiento.

    Un abrazo

    Africa

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