domingo, 29 de julio de 2012

SOBRE EL CAMBIO


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El cambio es dolor; los cambios de situación desubican y desorientan; emborronan pensamiento y alma; nos negamos al cambio por no sentir el dolor… Lo que era comprensión y unión –“pensamientos en una misma dirección”- se tornan lejanos huidizos y esquivos. En mi comprensión, el dolor,  se transfigura en aceptación…

“Esta nueva situación no la deseaba; me lamento de la misma pero,… no es posible volver atrás… Me duele el cambio; débil y fuerte a la vez; sentimiento dual… Voluntad firme y serena… Camino solitario… Hay que seguir; nada que reconquistar…"
 
El sufrimiento, producido por un cambio, no es una opción; es respuesta viva; recuerdos de tiempos pasados, pero jamás olvidados…

Fortaleza de la impotencia: a mayor estremecimiento de incapacidad más fuerte me siento y más me reivindico… Cambiamos para mantenernos; cambiamos para no cambiar…

¡En mi debilidad manifiesta resurjo con más fuerza!


Santiago Peña


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sábado, 28 de julio de 2012

SOBRE LA IGNORANCIA


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En el mundo “civilizado” la felicidad del no saber te puede llegar a proporcionar una aparentemente cómoda relajada trayectoria vital: “nada se; nada conozco; nada añoro; nada ambiciono; nada envidio…”

Los pueblos “perdidos” de La Amazonía (a día de hoy se calcula que sigue habiendo un número importante de tribus, en este pulmón de la Tierra, sin “descubrir” –por no decir que no nos han descubierto ellos-) viven en una absoluta ignorancia sobre lo que acontece en el mundo exterior (no saben de su existencia) y, posiblemente, son felices…

Los sabios no son felices por el hecho de ser sabios si no que asumen plenamente su infelicidad, dotándolos de un estado de templanza que se podría interpretar como de una cierta “felicidad”…

No deseo vivir ignorante; anhelo entender, comprender y aceptar.


Santiago Peña


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